miércoles, 29 de mayo de 2013

REFLEXIONES SOBRE EL ESTADO Y LA DEMOCRACIA

El punto es, ¿podemos esperar de nuestros representantes populares? ¿Cómo hacer que los partidos mejoren su desempeño en la forma de hacer gobierno?
 
La reforma del Estado mexicano, no debe ser un tema nada más, por lo que debe formalizarse jurídicamente una variedad de temas y modificaciones que justifique ante la sociedad para qué sirve el Estado.
 
Y qué decir del elevado costo de nuestra democracia, que es un problema serio, por lo que necesitamos elecciones más baratas.
 
El cálculo es inmediato, la ciudadanía no puede continuar padeciendo el dilema de ser prisionero de la interacción entre actores políticos bajo sistemas anárquicos de representación popular que como el Leviatán, impone castigos y distribuye premios.
 
La razón es simple, hay que repensar los liderazgos, la forma de obtener poder a partir del poder del otro y recomponer la idea del Estado como un actor dedicado a elevar el valor de tiempo en sus ciudadanos y éstos, sean conscientes en que la utilidad de sus acciones agregará valor y mayor utilidad a sus acciones futuras.
 
Los huecos libres son reducidos y los discursos itinerantes, por ello no podemos caer en la complacencia: México y Tabasco deben caminar en contrasentido de la pereza y las distancias cortas.
 
Twitter: @pumamemo
 

LA TAREA DE LEGISLAR

Como suele suceder, el ciudadano va a votar en elecciones legislativas y presidenciales. De igual modo, para renovar Congresos locales y al Ejecutivo estatal. Finalmente aflora en la parafernalia electoral, la venerable equidad para justificar barbaridades electorales y todo se retroalimenta constantemente.
 
Eliges a tus diputados por mayoría y se distribuyen los legisladores de representación proporcional, que implica que seguramente habrá más de tres partidos políticos, bajo un esquema de legisladores que son más leales a sus partidos -que a su electorado-, dado que de sus agrupaciones políticas depende su nominación.
 
Para los partidos -en este contexto-, difícil es que se le permita tener una mayoría simple o calificada, lo que redunda en que el Jefe del Ejecutivo no tiene una mayoría garantizada en el Congreso, de tal manera, las divergencias se resuelven de otra forma, menos a través de la negociación política en el Poder Legislativo e incluso, llega a haber una parálisis entre Ejecutivo y Legislativo. Tal y como ha ocurrido en historia reciente de México y con expresiones legales de frenar cualquier ola plural a favor de la transición democrática.
 
No existe forma alguna de que el gobierno que se forme incluya a más de un partido, en una coalición legislativa y de gabinete. No obstante, hay gobiernos que nacen de una mayoría clara e incluso apabullante en sus respectivos Congresos, a lo que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), ya ha dado una receta para paliar el monopolio legislativo a favor de un partido expresado a través de una super-mayoría, tal y como ocurrió en Oaxaca en 2010.
 
Cabe mencionar, que los regímenes presidenciales al tener un sistema de separación de poderes y partidos indisciplinados carecen de incentivos para la formación de coaliciones legislativas, lo que produce gobiernos divididos, parálisis legislativas, gobiernos inefectivos y en el peor de los casos el desmoronamiento de las democracias.
 
AGENDA PÚBLICA
 
Esta situación es inquietante, por ello la importancia de iniciativas como el Pacto por México, para alcanzar el consenso de los partidos políticos. Sin embargo, los retos son mayúsculos ante la impaciencia popular frente a los cálculos económicos, de ingreso y de consumo de la mayoría de la sociedad, asociado a su empobrecimiento, lo que habrá de reflejar precisamente las inconsistencias de los políticos.
 
México tiene que ser competitivo y su imagen no debe girar en torno al populismo retorcido, sustentado en falsas creencias originales y culturales neo-fundacionales, ni a la izquierda caduca ideológicamente.
 
No es necesario ser un teórico para darse cuenta que la crisis económica global de los últimos años ha dejado en claro sus efectos en México. Por lo expuesto anteriormente, se debe tener como prioridad aquellas razones para abatir la pobreza y pasar de la agenda mínima a una de mayor alcance y envergadura, con reformas económicas y sociales de gran calado.


                                                                                                 

 

martes, 21 de mayo de 2013

BALANCE DE LA TRANSPARENCIA, ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA Y FISCALIZACIÓN SUPERIOR EN TABASCO


El derecho a la información fue elevado a rango constitucional en 1977, cuando se agregó un párrafo al artículo sexto constitucional que señalaba que el derecho a la información sería garantizado por el Estado. Sin embargo, quedó durante veinte cinco años sin una ley efectiva que regulara este postulado constitucional y fue hasta julio de 2002, cuando fue promulgada la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental.
A partir de entonces, las entidades federativas comenzaron a legislar -en el ámbito local de su competencia sobre este rubro-, para emitir leyes locales que garantizaran este derecho de acceso a la información pública y transparencia gubernamental.
No obstante, el contenido de estas leyes no fue homogéneo, ya que el ciudadano tenía un derecho diferenciado en las entidades federativas e incluso había órganos garantes que no podían sancionar ni facultades vinculatorias, lo que hacía nugatorio el derecho de acceso a la información pública.
En su momento, esto significó que Tabasco se sumara a la avanzada del derecho de acceso a la información, con una serie de iniciativas que presentaron las diferentes fracciones de los partidos políticos a partir de 2002.
En 2006 se presentó la Iniciativa de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Estado Tabasco, la cual, sería promulgada el 10 de febrero de 2007. Sin embargo, esta legislación adolecía de algunos elementos que hicieran realmente efectiva la salvaguarda de este derecho y la rendición de cuentas.
Mediante la reforma constitucional del 22 de diciembre de 2007, se otorgó autonomía al Instituto Tabasqueño de Transparencia y Acceso a la Información Pública (ITTAIP), elevándose a rango constitucional el derecho a la información pública, estableciéndose así las bases mínimas para su ejercicio.
Otras reformas que se implementaron para consolidar la transparencia y la modernización administrativa en la entidad fue la Ley de Archivos Públicos del Estado de Tabasco -aprobada el 27 de diciembre de 2008-, pero que hasta el momento carece de reglamento, lo que ha reducido la posibilidad de avanzar sustancialmente hacia una mejor organización administrativa y agilizar el proceso de acceso a la información pública y rendir cuentas claras en la entidad.
Por lo que hace a los datos personales, en el país se está realizando un esfuerzo importante para su protección; poco a poco se han generado leyes para regular esa situación e incluso reformas a la Constitución Federal, con el propósito de controlar el uso indiscriminado de esta información.
Como hemos señalado, la rendición de cuentas es la obligación de dar cuenta y razón a la sociedad de los actos realizados por el mandato recibido y su reclamo se finca, en la búsqueda de la verdad sobre los asuntos que son de interés público. Por ello, la transparencia es un valor fundamental que nos permite ejercer plenamente nuestros derechos ciudadanos.
De tal forma, como un verdadero principio de eficiencia administrativa se identifica la rendición de cuentas, ya que la publicidad de la información se traduce en un mecanismo de supervisión ciudadana y de eficiencia de la actividad del Estado. Es decir, la transparencia implica la obligación de someter al escrutinio público la información de todos aquellos que manejan recursos públicos para que la sociedad evalúe su desempeño.
Por otra parte, hoy en día no podemos hablar de un gobierno transparente sin reclamar la rendición de cuentas clara y oportuna de quienes ejercen el poder. La adecuada rendición de cuentas debe sujetar el uso del dinero público a las disposiciones legales y óptimos estándares de desempeño.
En el cumplimiento de las obligaciones de transparencia es menester señalar que no es suficiente publicar datos en los portales de Internet. El esquema de transparencia debe operar en dos vías: el derecho a recibir información, pero también la obligación de divulgarla y explicar su contenido.
La necesidad de construir gobiernos eficaces que complementen la democracia electoral con un impulso decidido en la transparencia y rendición de cuentas, constituye una premisa fundamental de la reforma del Estado y que en Tabasco debe ser prioridad.
La política desde el pensamiento clásico, no solo significa diálogo y tolerancia de las ideas de otros, sino también espíritu de cambio, aplicación de la ley y apertura ante la sociedad. Los gobiernos que no aceptan rendir cuentas para ser fiscalizados, los que rechazan la transparencia y la medición de resultados, tienden a ser gobiernos antidemocráticos con altos niveles de corrupción.
La corrupción y la impunidad son elementos inherentes a una cultura patrimonialista, que obstaculiza el proceso de transición de una democracia electoral a una democracia representativa y participativa.
Tabasco no pude retroceder en cuanto a la cultura de transparencia entre las autoridades públicas y la sociedad, pues ello como he sostenido, aporta mayor calidad al ejercicio cotidiano de la democracia en la entidad. Precisamente, un gobierno que ve más allá de los mínimos en la entrega de información, incrementa su utilidad social y produce valor agregado a los fines públicos.
Debe quedar claro y con copia al gobierno estatal, que una mayor autonomía de los órganos responsables de la transparencia y de la fiscalización superior, fortalece la actuación de los poderes públicos. De la misma forma que una actuación más independiente de las instancias judiciales fortalece el Estado de Derecho.
Por lo expuesto, debe también dotarse un nuevo marco jurídico que norme la actuación del Órgano Superior de Fiscalización (OSF) y garantice a la ciudadanía la neutralidad que esta institución requiere, con el fin de evitar presiones políticas de interés partidista. En razón que la transparencia, la rendición de cuentas y la fiscalización superior, constituyen un trinomio inseparable que debemos arraigar en la cultura democrática de nuestro estado, en beneficio de los ciudadanos.
Para lograrlo, gobierno y sociedad deben darse cuenta que el verdadero cambio no está solamente en las leyes o en el partido que gobierne, sino también en la conciencia de todos los tabasqueños.
 
Reflexión
El combate a la corrupción es una lucha por la ética política y la moral pública que deben de imperar en todos los ámbitos de la gestión gubernamental y de la sociedad, en su conjunto. No resulta ocioso invocar las palabras de Santo Tomás de Aquino, cuando decía que el rencor de los pueblos contra la corrupción de un régimen, dura más tiempo que su gratitud por los beneficios que recibieron de él.
Respecto a los escándalos de corrupción, hay que dejar claro que la ética política y la moral pública requieren correspondencia. Un gobierno corrupto no podría subsistir si tenemos una sociedad honesta y de igual forma, ningún gobierno podría ser honesto si la sociedad tolera y acepta la corrupción.
E-mail: guillermoars@gmail.com
Twitter: @pumamemo

BALANCE DE LA TRANSPARENCIA, ACCESO A LA INFORMACIÓN PÚBLICA Y FISCALIZACIÓN SUPERIOR EN TABASCO


El derecho a la información fue elevado a rango constitucional en 1977, cuando se agregó un párrafo al artículo sexto constitucional que señalaba que el derecho a la información sería garantizado por el Estado. Sin embargo, quedó durante veinte cinco años sin una ley efectiva que regulara este postulado constitucional y fue hasta julio de 2002, cuando fue promulgada la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental.
A partir de entonces, las entidades federativas comenzaron a legislar -en el ámbito local de su competencia sobre este rubro-, para emitir leyes locales que garantizaran este derecho de acceso a la información pública y transparencia gubernamental.
No obstante, el contenido de estas leyes no fue homogéneo, ya que el ciudadano tenía un derecho diferenciado en las entidades federativas e incluso había órganos garantes que no podían sancionar ni facultades vinculatorias, lo que hacía nugatorio el derecho de acceso a la información pública.
En su momento, esto significó que Tabasco se sumara a la avanzada del derecho de acceso a la información, con una serie de iniciativas que presentaron las diferentes fracciones de los partidos políticos a partir de 2002.
En 2006 se presentó la Iniciativa de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Estado Tabasco, la cual, sería promulgada el 10 de febrero de 2007. Sin embargo, esta legislación adolecía de algunos elementos que hicieran realmente efectiva la salvaguarda de este derecho y la rendición de cuentas.
Mediante la reforma constitucional del 22 de diciembre de 2007, se otorgó autonomía al Instituto Tabasqueño de Transparencia y Acceso a la Información Pública (ITTAIP), elevándose a rango constitucional el derecho a la información pública, estableciéndose así las bases mínimas para su ejercicio.
Otras reformas que se implementaron para consolidar la transparencia y la modernización administrativa en la entidad fue la Ley de Archivos Públicos del Estado de Tabasco -aprobada el 27 de diciembre de 2008-, pero que hasta el momento carece de reglamento, lo que ha reducido la posibilidad de avanzar sustancialmente hacia una mejor organización administrativa y agilizar el proceso de acceso a la información pública y rendir cuentas claras en la entidad.
Por lo que hace a los datos personales, en el país se está realizando un esfuerzo importante para su protección; poco a poco se han generado leyes para regular esa situación e incluso reformas a la Constitución Federal, con el propósito de controlar el uso indiscriminado de esta información.
Como hemos señalado, la rendición de cuentas es la obligación de dar cuenta y razón a la sociedad de los actos realizados por el mandato recibido y su reclamo se finca, en la búsqueda de la verdad sobre los asuntos que son de interés público. Por ello, la transparencia es un valor fundamental que nos permite ejercer plenamente nuestros derechos ciudadanos.
De tal forma, como un verdadero principio de eficiencia administrativa se identifica la rendición de cuentas, ya que la publicidad de la información se traduce en un mecanismo de supervisión ciudadana y de eficiencia de la actividad del Estado. Es decir, la transparencia implica la obligación de someter al escrutinio público la información de todos aquellos que manejan recursos públicos para que la sociedad evalúe su desempeño.
Por otra parte, hoy en día no podemos hablar de un gobierno transparente sin reclamar la rendición de cuentas clara y oportuna de quienes ejercen el poder. La adecuada rendición de cuentas debe sujetar el uso del dinero público a las disposiciones legales y óptimos estándares de desempeño.
En el cumplimiento de las obligaciones de transparencia es menester señalar que no es suficiente publicar datos en los portales de Internet. El esquema de transparencia debe operar en dos vías: el derecho a recibir información, pero también la obligación de divulgarla y explicar su contenido.
La necesidad de construir gobiernos eficaces que complementen la democracia electoral con un impulso decidido en la transparencia y rendición de cuentas, constituye una premisa fundamental de la reforma del Estado y que en Tabasco debe ser prioridad.
La política desde el pensamiento clásico, no solo significa diálogo y tolerancia de las ideas de otros, sino también espíritu de cambio, aplicación de la ley y apertura ante la sociedad. Los gobiernos que no aceptan rendir cuentas para ser fiscalizados, los que rechazan la transparencia y la medición de resultados, tienden a ser gobiernos antidemocráticos con altos niveles de corrupción.
La corrupción y la impunidad son elementos inherentes a una cultura patrimonialista, que obstaculiza el proceso de transición de una democracia electoral a una democracia representativa y participativa.
Tabasco no pude retroceder en cuanto a la cultura de transparencia entre las autoridades públicas y la sociedad, pues ello como he sostenido, aporta mayor calidad al ejercicio cotidiano de la democracia en la entidad. Precisamente, un gobierno que ve más allá de los mínimos en la entrega de información, incrementa su utilidad social y produce valor agregado a los fines públicos.
Debe quedar claro y con copia al gobierno estatal, que una mayor autonomía de los órganos responsables de la transparencia y de la fiscalización superior, fortalece la actuación de los poderes públicos. De la misma forma que una actuación más independiente de las instancias judiciales fortalece el Estado de Derecho.
Por lo expuesto, debe también dotarse un nuevo marco jurídico que norme la actuación del Órgano Superior de Fiscalización (OSF) y garantice a la ciudadanía la neutralidad que esta institución requiere, con el fin de evitar presiones políticas de interés partidista. En razón que la transparencia, la rendición de cuentas y la fiscalización superior, constituyen un trinomio inseparable que debemos arraigar en la cultura democrática de nuestro estado, en beneficio de los ciudadanos.
Para lograrlo, gobierno y sociedad deben darse cuenta que el verdadero cambio no está solamente en las leyes o en el partido que gobierne, sino también en la conciencia de todos los tabasqueños.
 
Reflexión
El combate a la corrupción es una lucha por la ética política y la moral pública que deben de imperar en todos los ámbitos de la gestión gubernamental y de la sociedad, en su conjunto. No resulta ocioso invocar las palabras de Santo Tomás de Aquino, cuando decía que el rencor de los pueblos contra la corrupción de un régimen, dura más tiempo que su gratitud por los beneficios que recibieron de él.
Respecto a los escándalos de corrupción, hay que dejar claro que la ética política y la moral pública requieren correspondencia. Un gobierno corrupto no podría subsistir si tenemos una sociedad honesta y de igual forma, ningún gobierno podría ser honesto si la sociedad tolera y acepta la corrupción.
E-mail: guillermoars@gmail.com
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lunes, 13 de mayo de 2013

¿PELIGRAN LOS JUICIOS ORALES EN TABASCO POR FALTA DE RECURSOS?


El 18 junio de 2008 se realizó una reforma constitucional que implicaba una profunda renovación del sistema de justicia penal en México, que buscaba revertir los problemas de injusticia e ineficiencia del modelo procesal inquisitivo.

A partir de esta reforma, inició en el país el proceso implementación de los juicios orales en materia penal. Esto implicó una tarea de planeación estratégica de políticas públicas, comprendida básicamente en tres rubros: a) Adecuación de la legislación secundaria; b) Capacitación integral de los operadores jurídicos y; c) Dotación de recursos económicos.

El nuevo sistema de justicia penal debe por mandato constitucional estar vigente en las treinta y dos entidades federativas y en el ámbito de competencia federal para junio de 2016. Chihuahua, Oaxaca, Zacatecas, Estado de México y Morelos, son las entidades federativas con mayor antigüedad en el funcionamiento del sistema de juicios orales.

A partir de 2009, los poderes Ejecutivo y Judicial de Tabasco impulsaron conjuntamente, una propuesta de cambio estructural del procedimiento penal en la entidad y se puso en marcha el nuevo proceso penal acusatorio y oral en el municipio de Macuspana en septiembre de 2012 y convirtiéndose en el tercer estado del sur-sureste del país en implementarlo.

Entre 2009 y 2012, no sólo se adecuaron los marcos constitucional, legal y reglamentario que rigen en la entidad, conforme a las reformas constitucionales federales en materia de justicia penal. Además, se sentaron las bases para que en el año 2016 el nuevo sistema de justicia penal, quede aplicado en todo el estado.

Sin embargo, actualmente externamos nuestra preocupación por la implementación de los juicios orales en el estado. Precisando que Tabasco -al igual que el resto de las entidades federativas-, recibe recursos federales a través del sistema de implementación de la nueva justicia penal en materia de juicios orales, que maneja la Secretaría Técnica del Consejo de Coordinación para la Implementación del Sistema de Justicia Penal de la Secretaría de Gobernación (SETEC). Por lo tanto, en la implementación actual de los juicios orales se debe ser sumamente cuidadoso, ya que una mala planeación podría generar más daños que los que se pretende solucionar y peores resultados daría el detener su instrumentación, pues tendríamos entonces, dos sistemas procesales distintos.

En Tabasco, la adopción de los denominados juicios orales no representa la panacea en la construcción de un régimen de justicia democrático, pues hace necesarios mayores ajustes a las normas secundarias locales y no quiere decir que todo vaya a ir sobre ruedas. Hay muchas áreas de mejora y enormes desafíos, pues es una reforma tan profunda, que implica cambios en la cultura jurídica. Recordemos que desde sus primeros bosquejos la reforma despertó controversia entre abogados, funcionarios y organizaciones sociales.

Uno de los aspectos más importantes de esta reforma y que probablemente la está trabando, no sólo en Tabasco sino en la mayoría de las entidades federativas, es el nuevo sistema de profesionalización que conlleva y el servicio civil de carrera. Además de cuestiones salariales, está el tema de fondo de que la nueva redacción del artículo 123 constitucional ha terminado con la estabilidad laboral de policías y ministerios públicos.

El gobierno de Tabasco debe tener muy claro sus ejes estratégicos para consolidar con éxito el nuevo sistema de justicia penal acusatorio como son: la normatividad; la planeación; la capacitación; la reorganización; la infraestructura; el equipamiento; la tecnología y; la difusión.

Además, que en el Pacto por Tabasco, uno de los compromisos adquiridos por los partidos políticos, es la consolidación de los juicios orales. Por tanto, el gobierno estatal debe comprometerse en la implementación del nuevo modelo de justicia penal y consolidarlo, pues en ello, demostrará que se tiene el talento y la capacidad en Tabasco para satisfacer estándares internacionales, generar buenas prácticas y un cambio exitoso con los juicios orales.

La incorporación del sistema procesal penal acusatorio en el estado está contemplada en la ley, de forma gradual y por regiones, siendo la siguiente fecha el 9 de diciembre de este año en el municipio de Cunduacán, donde deben arrancar los juicios orales.

 

 

REFLEXIÓN

Hay tiempo para corregir, pero no es permisible argumentando falta de recursos, se retrase la implementación de los juicios orales en la entidad, que está regida por un plazo constitucional.

Habrá que evaluar el desempeño de la Secretaria Técnica de la Comisión Interinstitucional para la Implementación del Sistema de Justicia Penal en el Estado de Tabasco (CIISJUPET), como la instancia coordinadora en el ámbito estatal de la instrumentación de los juicios orales.

 

E-mail: guillermoars@gmail.com

Twitter: @pumamemo